El nuevo Canciller, Kwasi Kwarteng, anunció el viernes 23 de septiembre una serie de medidas para luchar contra el aumento de la inflación y el impacto que está teniendo en los hogares.
Una de las medidas más debatidas es el aumento del umbral del impuesto de Actos Jurídicos Documentados de 125.000 a 250.000 libras y de 300.000 a 425.000 libras para los compradores de primera vivienda, lo que permitirá a más de 200.000 compradores evitar el pago de dicho impuesto.
La medida entra en vigor inmediatamente, lo que significa que los compradores que estén ultimando hoy la compra de su vivienda podrán beneficiarse de la desgravación fiscal.
Suponiendo que no se modifiquen los tramos preexistentes del impuesto sobre actos jurídicos documentados, el anuncio de Kwarteng significa que el coste de este impuesto para una vivienda media de 312.000 libras en Inglaterra bajará de 5.600 a 3.100 libras, lo que supone un descenso del 80%.
Así pues, las nuevas tarifas son las siguientes:
- 0%: 0 £ - 250.000 £ (425.000 £ para compradores de primera vivienda);
– 5%: £250,000 – £925,000;
– 10%: £925,000 – £1,500,000;
– 12%: £1,500,000+.
El Ministro de Hacienda británico añadió que el impuesto del timbre reducido para los compradores de primera vivienda se aplicará a las propiedades de hasta 625.000 libras, frente a las de 500.000 libras.
El plazo para el pago del impuesto de Actos Jurídicos Documentados sigue siendo de 14 días a partir de la fecha de finalización de la compra de la propiedad.
Sin embargo, la medida ha suscitado algunas dudas entre los expertos; el Instituto de Estudios Fiscales afirma que, aunque Liz Truss y Kwasi Kwarteng son partidarios de una fiscalidad baja, sus recortes seguirían dejando la fiscalidad en proporción al PIB en su nivel más alto desde los años cincuenta.
Si se hubiera permitido a la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR) elaborar hoy una nueva previsión económica, habría concluido que el Gobierno estaba en vías de cumplir sus objetivos fiscales, pero el Instituto de Estudios Fiscales, que tiene un cometido analítico similar al de la OBR, examinó los datos y concluyó que el Gobierno podría incumplir dos objetivos clave: reducir la deuda en proporción del PIB al tercer año de la previsión y equilibrar las cuentas corrientes al tercer año.
Kwarteng no anunció ningún cambio en el resto de tramos impositivos. Suponiendo que estos tipos se mantengan sin cambios, los compradores pagarían el impuesto de Actos Jurídicos Documentados a un tipo de 5% sobre el valor de una propiedad por encima de 250.000 £ hasta 925.000 £, 10% sobre el valor entre 925.000 £ y 1,5 millones de £, y luego un tipo máximo de 12% por encima de 1,5 millones de £.
Además, la canciller no anunció cambios en el recargo sobre viviendas adicionales, que seguirá siendo de tres puntos porcentuales, ni en el recargo sobre compradores extranjeros, que seguirá siendo de dos puntos porcentuales.
Domenico Santomasi
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