Brandon Lewis ha dicho a los diputados que cada solicitud de estatus de residente tras el Brexit debería llevar "semanas, no meses
El ministro de Inmigración ha prometido que la tramitación de una solicitud individual de un ciudadano de la UE para obtener el estatuto de residente en Gran Bretaña "no debería llevar más de un par de semanas" cuando se inicie el registro en el segundo semestre del próximo año.
Brandon Lewis declaró ante la Comisión de Asuntos de Interior de los Comunes que se iba a contratar a 1.200 personas más para tramitar las 3,5 millones de solicitudes de ciudadanos de la UE en dos años y medio.
También dijo a los diputados el martes que era optimista de que se podría llegar a un acuerdo antes de Navidad sobre los derechos de los ciudadanos de la UE en el Reino Unido en las negociaciones del Brexit. Sin embargo, se negó a comentar las informaciones según las cuales el gabinete interno del Brexit había decidido el lunes que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea podría seguir desempeñando un papel para garantizar sus derechos durante un periodo de transición de dos años.
El ministro del Interior sí confirmó que a las personas a las que se deniegue el "estatuto de asentado" y se considere que no son ciudadanos de la UE en Gran Bretaña de forma ilegal se les podrían congelar las cuentas bancarias y enfrentarse a la deportación antes de que se resuelva cualquier recurso ante los tribunales británicos.
El grupo 3million, que representa a los ciudadanos de la UE en Gran Bretaña, cuestionó inmediatamente la afirmación de Lewis de que era probable un acuerdo con la UE sobre el "estatus de asentado" antes de Navidad: "Nos preguntamos cómo. Siguen existiendo importantes escollos", tuiteó, señalando las continuas diferencias sobre el papel del TJUE, sobre los derechos de reagrupación familiar que podrían afectar a miles de personas, y la aclaración de que no deben enfrentarse a "medidas de entorno hostil".
Yvette Cooper, presidenta de la Comisión de Asuntos de Interior de los Comunes, se mostró escéptica ante la posibilidad de que 1.200 personas más -de las que 700 ya han sido contratadas- sean suficientes, cuando la Agencia de Visados e Inmigración del Reino Unido emplea actualmente a 6.500 personas para tramitar 3 millones de solicitudes de visado al año. Según ella, ya hay un retraso de tres meses en la tramitación de las solicitudes de documentos de residencia permanente de los ciudadanos de la UE.
El ministro del Interior insistió, sin embargo, en que las solicitudes de la UE serían mucho más sencillas que el grueso de los casos habituales del UKVI y se tramitarían mediante un nuevo sistema "sencillo y rápido", con un portal de usuario en línea similar al que se utiliza para renovar los permisos de conducir.
Según Lewis, los solicitantes de un "estatuto asentado" en la UE, en función del resultado de las negociaciones, tendrían que verificar su identidad, pasar un control de criminalidad y establecer cinco años de residencia en el Reino Unido. El Ministerio del Interior utilizaría las bases de datos fiscales y de la seguridad social del HMRC para verificar las solicitudes. Los solicitantes no tendrían que presentar sus pasaportes para demostrar su residencia.
El nuevo sistema, que se está desarrollando con grupos de nacionales de la UE, se pondrá a prueba en el primer semestre del próximo año y la tramitación de cada solicitud debería llevar "un par de semanas y no meses". Dijo que, a diferencia de otros casos de UKVI, el sistema se basará en "un enfoque cultural diferente" de que al solicitante se le va a conceder el estatus de asentado.
No obstante, dijo que los ciudadanos de países no pertenecientes a la UE y otros que intentaran "engañar al sistema" podrían verse rechazados y enfrentarse a la deportación antes de que sus recursos legales pudieran ser atendidos en los tribunales.
El ministro de Inmigración fue interpelado por Cooper sobre la tasa de error 10% del Ministerio del Interior en la revocación de permisos de conducir o la denegación de nuevas cuentas bancarias a las personas identificadas erróneamente como ilegales en el país.
Intentó tranquilizar a los diputados asegurándoles que, cuando a partir de enero los bancos tengan que realizar comprobaciones de inmigración en millones de cuentas bancarias existentes, no se congelará la cuenta de nadie hasta que se haya hecho una segunda comprobación con el Ministerio del Interior.
Se exigirá a los bancos que cotejen automáticamente sus cuentas con la base de datos del Ministerio del Interior sobre personas que se encuentran ilegalmente en el país. Pero confirmó que era posible que alguien identificado erróneamente como inmigrante ilegal viera su cuenta bancaria congelada hasta 12 meses mientras recurría ante los tribunales.
Artículo de "theguardian
